Son tan apañados como los estudiantes.
Hoy he ido a ver la Pennsylvania Orchestra, un concierto de chelo, maravilloso...por 8 dólares para estudiantes y ¡te colocan en los sitios más caros que han quedado libres! Es genial.
Antes de empezar el concierto, han empezado a llegar autobuses de la tercera edad.
Yo, que como una idiota me he gastado mis dólares en un café y un minibocata-timo. Y mientras me lo comía, he tenido que ver cómo en la mesa de en frente se habían sentado dos parejas. Uno de ellos sacó platos de cumpleaños y los repartió. Otro, cuatro trozos de bizcocho casero envueltos en papel de plástico. Otra, cuatro vasos y, no te lo pierdas, ¡hielos en un tupper! And so on... Esta gente nos da mil vueltas a los estudiantes.
Antes de empezar el concierto he echado un vistazo al personal: pelo blanco, el 90%.
Dios mío, me codeo con los del IMSERSO, debería de estar trabajando.
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